La privilegiada y singular
situación de Cullera, abierta al mar, bordeada por su montaña y atravesada por
el río Júcar te hará descubrir, un increíble patrimonio natural e histórico. La
playa del Racó, de fina arena y aguas
poco profundas, es la más accesible. Es encuentra en la zona con las
edificaciones más espectaculares y el urbanismo menos denso y acoge asimismo
los hoteles más modernos de la ciudad. En los meses de julio y agosto dispone también
de un punto accesible para personas con movilidad reducida. En época estival,
los más pequeños disponen de un parque infantil en el paseo marítimo.